El Asesinato de Olof Palme: Un Misterio Político en Suecia
El 28 de febrero de 1986, Estocolmo, Suecia, fue testigo de uno de los asesinatos más impactantes y misteriosos de la historia política europea. Olof Palme, el primer ministro sueco, fue asesinado a tiros mientras caminaba de regreso a casa con su esposa, Lisbet Palme. Este trágico evento no solo sacudió a Suecia, sino que también dejó una marca indeleble en la memoria colectiva del país.
El Crimen
Olof Palme salió del cine Grand Cinema acompañado por su esposa y su hijo. Mientras caminaban por la calle Sveavägen, un hombre se acercó a ellos y disparó a quemarropa a Palme en la espalda. La pareja no llevaba escolta en ese momento, lo que hizo que el asesinato fuera aún más impactante. Palme murió a los pocos minutos de recibir el disparo.
Investigación y Teorías
El asesinato de Olof Palme generó una intensa investigación y numerosas teorías de conspiración. Inicialmente, se detuvo a Christer Pettersson, un delincuente conocido, quien fue condenado por el crimen, pero la condena fue anulada por falta de pruebas. A lo largo de los años, se han propuesto múltiples sospechosos, incluyendo grupos ultraderechistas suecos, separatistas kurdos y servicios secretos sudafricanos.
En 2020, la Fiscalía sueca declaró a Stig Engström como el principal sospechoso, aunque Engström había fallecido en 2000. La resolución del caso ha sido un tema de debate y controversia, y muchas preguntas siguen sin respuesta.
Impacto y Legado
El asesinato de Olof Palme dejó una profunda huella en Suecia y en la política mundial. Palme era conocido por sus fuertes convicciones socialdemócratas y su compromiso con la justicia social, los derechos humanos y el pacifismo. Su muerte fue un golpe devastador para aquellos que compartían sus ideales y para el país en general.
Hoy en día, el caso sigue siendo objeto de fascinación y estudio, y el misterio que lo rodea ha inspirado numerosos libros, películas y documentales. La resolución del caso en 2020 ha sido vista como un paso hacia la curación de una herida nacional, aunque muchas preguntas siguen sin respuesta.
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